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Obama reconoce que G20 está dividido sobre ataque a Siria

6 de septiembre de 2013

La mayoría de los países del grupo económico busca una salida política o una acción avalada por Naciones Unidas.

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Imagen: Reuters

Aunque once países firmaron una declaración asegurando estar convencidos de la responsabilidad de Bashar al Assad en el ataque con armas químicas que presuntamente tuvo lugar el 21 de agosto en las afueras de Damasco, lo cierto es que Estados Unidos parece más bien aislado a nivel internacional en su objetivo de bombardear territorio sirio para no dejar impune el delito que se le atribuye al régimen local.

El mismo presidente Barack Obama reconoció este viernes (06.09.2013) que los líderes que se reunieron en San Petersburgo (Rusia) en la cumbre G20 estaban visiblemente divididos a la hora de formar parte de una ofensiva militar sin contar con la venia del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Obama destacó, en cambio, que casi todos, salvo Rusia, se mostraron de acuerdo en apuntar al Gobierno de Al Assad como el responsable del uso de armas químicas.

La intención original de la cumbre de tratar temas financieros e intentar revivir la economía mundial quedó relegada a un segundo plano por la crisis siria. En la noche del jueves 5 de septiembre, las autoridades conversaron sobre las diferencias. “Hubo un sincero intercambio de opiniones”, dijeron autoridades japonesas. “Hubo una larga discusión con una clara división del grupo”, añadió una fuente citada por la agencia Reuters.

Obama espera apoyo del Congreso

Debido a que China y Rusia se oponen a un ataque en el Consejo de Seguridad, Estados Unidos ha descartado ya esa vía para obtener el respaldo de la comunidad internacional e incluso Obama ha señalado que la ONU está paralizada ante la crisis. Por ello, el mandatario estadounidense espera ahora contar con el respaldo del Congreso de su país para lanzar la ofensiva.

Remarcando eso, Samantha Power, la embajadora estadounidense ante Naciones Unidas, dejó en claro el jueves 5 de septiembre que el país norteamericano había abandonado la posibilidad de trabajar con el Consejo sobre cómo responder al uso de armas químicas. Power dijo que “no hay un camino viable hacia adelante en este Consejo de Seguridad” y acusó a Rusia de hacerlo rehén.

Vladimir Putin, en tanto, comentó que en su encuentro con Obama “nos escuchamos y comprendimos, pero no estamos de acuerdo. Sin embargo, escuchamos sus razones y tratamos de analizarlas”. Xi Jinping también intentó persuadir a Obama. “Una solución política es la única alternativa correcta para una salida a la crisis siria; un ataque militar no puede resolver el problema de raíz. Esperamos que algunos países lo piensen dos veces antes de tomar medidas”, dijo.

Francia, por su parte, anunció que esperaría los resultados de las investigaciones que realizaron en Siria los inspectores de armas químicas de la ONU, al tiempo que Argentina criticó el “cinismo” estadounidense y pidió paz. España, en tanto, anunció que deseaba “una solución política”. Quizás el único “triunfo” diplomático de EE.UU. en el G20 fue la firma, por parte de once países de una declaración que condena el presunto uso de armas químicas por parte del Ejército sirio.

DZC (Europa Press, dpa, Reuters)

La canciller Angela Merkel y el presidente francés François Hollande, durante las reuniones.
La canciller Angela Merkel y el presidente francés François Hollande, durante las reuniones.Imagen: Eric Feferberg/AFP/Getty Images

Siguen las discrepancias en Siria