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Opel: ahora vienen los recortes

12 de septiembre de 2009

Tras la euforia inicial por la venta de Opel a Magna vienen las malas nuevas. Medios afirman que 4.000 alemanes perderán su empleo. Se acusa al Gobierno de promover una competencia desleal a raíz de la anunciada venta.

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Planta de Opel en Bochum.Imagen: AP

Los recortes de puestos de trabajo en las plantas alemanas de la automotriz Opel serán mayores de lo anunciado, indica hoy una información del semanario alemán "Der Spiegel".

Además de los 3.000 puestos que serán suprimidos en las líneas de producción serían eliminados otros 1.100 en la administración, reporta la revista en base a planes del fabricante austrocanadiense de componentes automovilísticos Magna.

La casa matriz de Opel, la estadounidense General Motors (GM), anunció el jueves que aceptará vender a un consorcio formado por Magna, el banco ruso Sberbank y la aumotriz rusa Gaz una participación de 55 por ciento de la subsidiaria Opel.

La mitad de la plantilla de 50.000 empleados está asentada en Alemania.

La venta a Magna era favorecida por el Gbierno alemán, que salvó a Opel de la insolvencia mediante una inyección de dinero y garantías por 4.500 millones de euros (6.500 millones de dólares).

Magna prometió preservar más puestos de trabajo en Alemania que su principal rival, el fondo de inversión belga RHJ.

¿Competencia desleal?

En tanto, el director de la Agencia Alemana Antimonopolios, Justus Haucap, criticó al Gobierno al que acusó de favorecer a Opel por encima de otros constructores de automóviles.

"Cada Opel que se vende es un Ford, un Volkswagen u otro coche que no se vende", sostuvo Haucap en un artículo en la página web del diario económico "Handelsblatt".

"En épocas electorales, sin embargo, muchas veces lamentablemente no hay lugar para los puntos de vista racionales", se quejó.

Merkel se presenta a la reelección en las generales del 27 de septiembre, pero ha negado que el rescate de Opel tuviera un trasfondo político.

"No estamos rescatando empresas, sino que mantenemos una posibilidad para que atraviesen la crisis financiera", sostuvo la jefa de gobierno en declaraciones al diario "Süddeutsche Zeitung".

No habrá subsidios, pero sí garantías

El canciller austriaco, Werner Faymann, descartó conceder subsidios directos a Opel; sin embargo, ésta sí podrá solicitar garantías al Estado austriaco, señaló.

Con sus declaraciones durante una entrevista en la radio pública Oel, Faymann reaccionó a un comunicado del Gobierno alemán, en el que señalaba que esperaba que otros países europeos con plantas de Opel compartieran el coste de la restructuración del debilitado fabricante de vehículos.

El canciller austriaco dijo que Magna podría solicitar garantías estatales por un máximo de 300 millones de euros (438 millones de dólares). Opel, actualmente subsidiaria de General Motors, opera una planta de producción cerca de Viena.

Bajo el acuerdo de transacción que aún tiene que ser ultimado, el gobierno alemán está dispuesto a aportar 4,5 millones de euros en concepto de garantías.

Magna no presionará al Estado autriaco para que le conceda apoyo financiero amenazando con cerrar la empresa, dijo Faymann, que añadió que estaba convencido de que "los ejecutivos de Magna no piensan en términos de chantaje".

El ministro de Finanzas alemán Karl-Theodor zu Guttenberg había dicho el jueves a la emisora de radio austriaca ORF que espera "dinero de aquellos que se ven a sí mismos como parte del final de un proceso a largo plazo".

dp/rtr

Editor: Enrique López