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Demostración de calidad

Thomas Klein3 de julio de 2016

Alemania ganó a Italia después de una emocionante tanda de penales. El cambio de táctica de Joachim Löw tuvo su recompensa. Una variante que, de todas formas, no habría sido necesaria, dice Thomas Klein.

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UEFA EURO 2016 - Achtelfinale | Deutschland vs. Slowakei Trainer Löw
Imagen: picture-alliance/dpa/A. Dedert

Al final, Joachim Löw lo hizo todo bien. Italia fue derrotada por primera vez en un torneo. A partir de ahora, el supuesto trauma debería desaparecer de la mente de los jugadores. Quien antes del partido esperaba una selección alemana muy ofensiva, sin embargo, quedó decepcionado. En su lugar, fue un partido intenso, emocionante y plagado de detalles tácticos el que disputaron los dos equipos. Era de esperar. Y es que antes del encuentro ambos entrenadores habían anunciado sorpresas. Anticiparon que intentarían algo especial. En el caso de Löw se tradujo en un planteamiento táctico atípico que sustituyó a su, hasta ahora, exitosa línea defensiva.

La línea de cuatro que le permitió no encajar ni un solo gol en los primeros cuatro partidos del campeonato fue sustituida por una línea de tres. Jerome Boateng, Mats Hummels y Benedikt Höwedes se encargaron de cerrar espacios en el centro de la zaga. Para lograr mayor poder defensivo, Jonas Hector y Joshua Kimmich fueron los responsables de los laterales. Con este planteamiento, Löw volvió a ajustarse a la táctica rival. Algo que en 2008 contra España y en 2012 contra Italia no funcionó, pero que en esta ocasión si resultó. Eso sí, con la suerte de su lado. Löw seguro recibirá numerosas palmadas en el hombro por esta estrategia arriesgada.

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Thomas Klein, reportero de DW.

La calidad está ahí

Su valor, sin embargo, pudo traducirse en imprudencia durante la primera media hora de partido. La selección alemana sufrió hasta que consiguió adaptarse a la nueva formación. Los espacios no aparecían, faltaba coordinación, pero mejoró a medida que transcurría el partido. A esto hay que añadir que los italianos se encontraron más cómodos que nunca en ataque. Al final todo el trabajo del equipo fue recompensado. Pero, eso sí, me tienen que permitir hacer la pregunta de por qué Löw acostumbra a adaptar su táctica a la de los rivales. Después de todo, Alemania es la actual campeona del mundo y, a menudo, es alabada y envidiada por su propia filosofía de juego. ¿Por qué no confiar en sus propias cualidades? Y es que el hecho de que la selección alemana tiene calidad para superar incluso a rivales como Italia, es incuestionable.

Para aprender: aquí puede usted leer la versión en alemán