Opinión: Nafris y "perfiles raciales", un debate agotador

 

Primero, los hechos: La Policía quería evitar este año, en la Nochevieja en Colonia, que se le pudiera tachar de fracasada, como sucedió con razón hace un año. Cuando presenciaba de brazos cruzados y, al principio no se daba cuenta, de que cientos de jóvenes, la mayoría procedente del Norte de África, acosaron sexualmente y de forma masiva. Por esa razón, este año se blindó la zona alrededor de la catedral con 1.700 policías. Cientos de jóvenes fueron controlados, a muchos se les prohibió el acceso a la zona de la catedral y alrededor de 100 fueron detenidos, entre ellos, 16 alemanes. La Policía averiguó, entre otros medios, a través de los chats que los norteafricanos aparentemente, como hace un año, se habían citado en Colonia. Y la Policía evitó así que se produjeran de nuevo actos violentos.

Un tuit inapropiado

Además, la Policía envió un tuit antes de la medianoche: "En la estación de trenes se está controlando a cientos de nafris”. ¿Nafris? Es decir, norteafricanos. Es una designación interna de la Policía para presuntos o verdaderos delicuentes procendentes del Norte de África.

Suena despectivo y demuestra que verdaderamente "en ese conflictivo momento”, como dijo disculpándose un portavoz policial, esa palabra llegara a la opinión pública. Y quizá sea también producto de la gran tensión vivida por los policías, cuyo claro objetivo era, impedir cualquier situación que pudiera repetirse como en 2015.

Un debate agotador

Las reacciones al tuit son igual de predecibles como agotadoras. Los Verdes consideran el término "nafri” inaceptable, y preguntan si la Policía llevó a cabo el "racial profiling” o evaluación del perfil racial, es decir, controlar a las personas teniendo en cuenta los rasgos físicos, lo que de hecho está prohibido. La Unión Demócrata Cristiana (CDU) defiende a la Policía, y el presidente de la Policía de Colonia rechaza haber actuado con racismo. En Twitter, una persona, que cree llevar la razón y pertenece a Los Verdes, responde con odio a la permanente comunidad online. A todos ellos se les ocurre otra designación para "los hombres jóvenes evidentemente procedentes del norteafricano” que la inofensiva "nafri”. ¿Y qué lección hemos aprendido de todo esto?

Simplemente no perder la calma

No todos los jóvenes procedentes del Norte de África acosan sexualmente a las mujeres, pero hace un año, la mayoría de los delincuentes procedía de allí. Negarlo es absurdo. En consecuencia, la Policía centró su labor en ese grupo. ¿Qué otra cosa debería haber hecho?

Por lo demás, la Policía hizo bien su trabajo. Vamos, simplemente no perdamos la calma. A los periodistas como nosotros, opina una gran mayoría, les encantan los conflictos y las disputas. Les ofrezco una contrapropuesta: Dejemos a un lado los "nafris” y concentrémonos en las informaciones verdaderamente importantes.