Opinión: Acuerdo Alemania - España no resuelve nada

Suena como un gran avance: a partir de este fin de semana, los refugiados que se presentan en la frontera alemana y ya estén sometidos a procedimientos de asilo en España pueden ser devueltos. España es actualmente el país europeo al que llega la mayoría e los refugiados, después de que Italia se negara a aceptar a personas rescatadas del Mediterráneo y Grecia se convirtiera en un callejón sin salida.

Sin embargo, hasta ahora se sabe poco sobre el acuerdo: unas pocas líneas publicadas por Twitter y algunas frases lanzadas durante una conferencia de prensa en Berlín. Al Ministerio Federal del Interior le parece especialmente importante señalar que los españoles no esperan nada a cambio. Y, sin embargo, podemos asumir que Alemania tendrá mucho cuidado para asegurar que España tenga los recursos necesarios para realmente registrar a los inmigrantes que llegan y procesar sus solicitudes de asilo. La canciller Merkel también hablará de ello con el Presidente del Gobierno español, José Manuel Sánchez, durante su visita a Andalucía. 

La fama de la burocracia alemana

Pero el acuerdo no es un gran avance, porque el número esperado de solicitantes de asilo registrados en España, que llegan a la frontera alemana a través de Francia o Suiza, es manejable. El número de personas que cruzan la frontera germano-austríaca es aún menor. Además, es probable que los españoles también hayan insistido en que todo el proceso, desde la recogida de los inmigrantes hasta la repatriación, debe completarse en un plazo de 48 horas. Quien conoce la burocracia alemana, puede expresar serias dudas de que esto funcione en la mayoría de los casos. Además, nadie sabe cuánto tiempo puede permanecer en el poder el Presidente Sánchez, con su nuevo pero inestable gobierno. Con la próxima crisis de gobierno en España, el acuerdo podría quedar obsoleto.

Por lo tanto, el acuerdo entre Berlín y Madrid es inestable y su impacto real es dudoso. Sin embargo, el Gobierno alemán quiere concluir acuerdos similares con Italia y Grecia. Porque estos acuerdos tienen principalmente una función para la política interna de Alemania. Son los éxitos que la canciller necesita para defenderse de los críticos de su política de refugiados. Con ello les dice "Fíjense, estoy haciendo algo".

Arriesgan su vida

Pero todo esto no debe distraer la atención del hecho de que el verdadero problema sigue sin resolverse: decenas de miles de personas siguen desplazándose desde África y países árabes para llegar a Europa.

Aceptan el riesgo de morir de sed en el desierto, ahogarse en el Mediterráneo o ser vendidos como esclavos por traficantes. Todo parece mejor que quedarse en los países de origen. Si estas personas logran llegar a Europa, se encuentran a un continente que sigue afrontando este problema con los viejos medios de aislamiento. Uno de ellos es el acuerdo firmado entre Alemania y España. Eso no será suficiente. Pero todas las fuerzas políticas de Europa parecen carecer actualmente de la voluntad y la fuerza para hacer más.

Autor: Rupert Wiederwald (GG)

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