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Orwell tenía razón

DW WORLD14 de febrero de 2008

Los afanes por lograr seguridad fronteriza para la Unión Europea pueden afectar a las libertades ciudadanas, dice la prensa.

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Huellas digitales rumbo al banco de información.
Huellas digitales rumbo al banco de información.Imagen: AP

Los controles propuestos por el comisario europeo de Justicia, Franco Frattini, para la Unión Europea, son comentados por el Frankfurter Rundschau de la siguiente manera: “Como sudece a menudo, las autoridades europeas disparan más allá del blanco con tales iniciativas. Frattini parece creer que a través de mecanismos técnicos es posible lograr un control absoluto de las fronteras. Aspira a contar con satélites, aeronaves y servicios secretos a fin de detectar a balseros africanos y persuadirlos para que no viajen a Europa. Su divisa parece ser: queremos saberlo todo, a cualquier precio. Los ciudadanos tienen el sentimiento creciente de que son entregados al Estado. Más observación equivale a menores libertades, así que debe ser bien fundamentada en cada caso. Ahora, luego de Estados Unidos, es Europa la que despierta suspicacias e inconformidad con la propuesta para recabar datos.”

Orwell tenía razón

A su vez, el Neue Osnabrücker Zeitung, de la ciudad alemana de Osnabrück,hace ironía de las propuestas presentadas en Bruselas: “El comisario Frattini formula una propuesta que no es sino un nuevo intento por aislar a la fortaleza europea y parar la inmigración no deseada. No es más que una medida defensiva. Ello traerá consigo un flujo incontrolable de datos personales, muchos de los cuales corresponderán a ciudadanos europeos. Si acaso son capaces de conservar la perspectiva, los coleccionistas de datos aspiran a controlar cada vez mejor el comportamiento de los ciudadanos. Pero a Frattini le faltó algo por considerar: lo que hoy no es posible, la técnica lo facilitará mañana. Los datos serán usados con algún fin, para lo cual será fácil encontrar una justificación. El escritor George Orwell, autor de 1984, tenía razón.”

Firmeza ante Washington

El País, de Madrid, advierte sobre otros peligros implícitos en la política europea de inmigración: “El objetivo es lograr un auténtico sistema común europeo de las fronteras exteriores, que vaya mucho más allá de la suma de las medidas y bancos de información nacionales. Por ello es importante que los Estados de la Unión Europea no cedan a las presiones que está ejerciendo Washington para llegar a acuerdos bilaterales con cada uno de los países sobre este tipo de normas de seguridad respecto a los datos de los viajeros que se desplazan de Europa a EEUU. Es comprensible que algunos países de Europa del Este a los que Washington reclama aún visados intenten superar esta traba. Pero la Unión ganará si presenta un frente común a Estados Unidos con quien, a regañadientes, firmó el año pasado un acuerdo sobre datos –incluidos los números de las tarjetas de créditos- de los que viajan hacia el otro lado del Atlántico.”