Otro triunfo para España: Sastre gana el Tour de Francia
27 de julio de 2008
Sastre logró el mayor triunfo de su carrera, con 1:05 minutos de ventaja sobre el australiano Cadel Evans, que repite el segundo puesto de 2007, y 1:20 sobre el sorprendente austriaco Bernhard Kohl, rey de la clasificación de la montaña.
Historial limpio
El de Sastre es el tercer triunfo español seguido en París, tras el de Pereiro en 2006 y Contador en 2007. Su nombre no aparece en ningún documento de la "Operación Puerto", nunca ha dado positivo en una prueba de dopaje y no hay ningún rincón oscuro en su pasado: el ganador del Tour de France 2008 aparece limpio y, junto a Alberto
Contador, personifica el dominio del ciclismo español.
Tras el retiro del multicampeón Lance Armstrong y la "caza" de los tramposos Jan Ullrich e Ivan Basso, el perfil del ciclismo cambió: no hay de momento una estrella que domine como Armstrong o Miguel Induráin. En plena renovación por los golpes del doping, el ciclismo se ha atomizado. España se ha sabido adaptar y es hoy por hoy la principal potencia.
Los nuevos españoles
Pereiro fue descrito por muchos como un campeón "casual". Se aprovechó del positivo de Floyd Landis en un Tour que nació marcado por la "Operación Puerto", que desarticuló la red de doping del doctor Eufemiano Fuentes y dejó fuera a los favoritos Ullrich y Basso.
Más serio se consideró el triunfo de Contador, refrendado por la reciente victoria en el Giro. Su presencia en 2006 en el equipo Liberty Seguros, del director Manolo Sáiz, implicado en la "Operación Puerto", le obligó a una continua defensa de su inocencia. Las mismas acusaciones pesaban y pesan sobre Valverde, al que la Corte Arbitral del Deporte protegió para que pudiera correr el pasado Mundial de Stuttgart.
Sospechas sobre España
La red de Fuentes en Madrid, los obstáculos de la justicia ordinaria para que se usen los datos del caso para imponer sanciones deportivas, lo que se interpreta fuera de España como un intento de ocultar la verdad, y los éxitos arrojan un permanente velo de sospecha a los triunfos españoles. Los positivos de Manuel Beltrán y de Moisés Dueñas en el Tour recién concluido ayudaron poco a que el ciclismo español se quitara la "letra escarlata".
"Es interesante constatar que es el segundo corredor español cazado", señaló el presidente de la Unión Ciclista Internacional (UCI), Pat McQuaid, tras conocerse el positivo de Dueñas. "No me sorprende que sea otro español", apostilló Hans-Michael Holczer, director del equipo Gerolsteiner.
El estigma de la permisividad del deporte español aún pesa. "Somos una referencia polideportiva y estamos luchando por un deporte limpio", dice ya como habitual muletilla Jaime Lissavetzy, máximo responsable del deporte en el gobierno español. Es una necesidad de justificación ante los continuos éxitos del deporte del país.
Acaparando trofeos
Con Sastre a punto de ganar el Tour, el diario "Süddeutsche Zeitung" reveló la implicación del director de su equipo, Bjarne Riis, y de su compañero Franck Schleck en la red de Fuentes. Pero la prensa alemana se rinde hoy a Sastre y lo llama "míster limpio". Han revisado su pasado y no han encontrado nada. "Puedo decir alto y claro que trabajo con honestidad y sacrificio", dice Sastre. Es la justificación obligada.
Mientras, en España se disfruta de lo que el diario "Marca" denomina la "edad del oro" del deporte español. Y Lissavetzky saca pecho: "¿Cuántos países pueden decir que en dos meses han ganado el Giro, el Tour, la Eurocopa de fútbol, Roland Garros y Wimbledon?"