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Para la sed, nada mejor que el agua

Cristina Papaleo5 de abril de 2004

Los alemanes, grandes amantes de la cerveza, prefieren ahora el agua mineral. Según el semanario “Focus”, los ciudadanos germanos tomaron el año pasado 129 litros de agua mineral y 117,5 litros de cerveza por cabeza.

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El agua mineral se impone en Alemania.Imagen: AP

¿Será por el tremendo calor sufrido en Europa en el verano pasado? ¿O es que los alemanes han revisado su relación con la cerveza? Sea como sea, las cifras sobre el consumo de agua del año 2003 dejan atónito a más de un productor del líquido germano por excelencia. Asimismo, el cuidado de la salud y la imagen ha dejado de ser tema tabú en Alemania. Cada vez son más los alemanes que cuidan su silueta, e intentan hacerlo también al no beber alcohol.

Ganancias inesperadas

A todo esto, el café sigue ocupando el primer lugar en las preferencias de los germanos, que consumen anualmente más de 150 litros por persona, según datos de agencias. En cuanto al agua, el consumo de 2003 llegó a subir un 14,6 por ciento en comparación con el de 1990. El agua más vendida en 2003 fue el agua mineral sin gas, que registró ganancias del 39,3 por ciento sobre 340 millones de litros. Los envases preferidos por el consumidor alemán son las botellas plásticas con retorno, cuyo consumo subió de 16,7 por ciento en 2002 al 29 por ciento en 2003.

Cuidar la imagen

Cuando el calor arrecia, se plantea la pregunta: ¿agua o cerveza? Esta vez los alemanes se decidieron por la variante sana y embotellada en su lugar de origen, el agua mineral. "Anteriormente se consideraba al agua mineral como un artículo barato, del que se podía prescindir", relata Heike Bölk, de la Unión Alemana de Aguas Minerales a "Focus". "Actualmente, está de moda pedir agua mineral", concluye.

Frau wählt Getränk aus
Imagen: Bilderbox

La cerveza, en cambio, siempre tuvo su lugar asegurado en la mesa del restaurante, y durante el bien merecido descanso después de la jornada laboral. En lo que respecta a esta costumbre, los alemanes no transigieron, ya que se sigue acostumbrando el vaso de cerveza bien helada como antesala a la cena y al descanso.

A pesar de ello, el consumo de agua mineral se ha impuesto, ya que la imagen corporal deseada no deja ya lugar a abdómenes abultados, lo que, como todo el mundo sabe, es una de las consecuencias casi irreversibles del consumo del líquido amado por los germanos. Debido a las exigencias de una moda que se dirige cada vez en mayor medida a quienes portan medidas corporales prepúberes, muchos hombres y mujeres, no sólo en Alemania, intentan caber en los modelos creados por diseñadores que parecen gustar del ahorro en materiales.