Régimen sirio recupera el control de Baba Amro

Según fuentes del ejército sirio, el barrio de Baba Amro cayó el jueves en manos de las fuerzas del Gobierno del presidente Baschar al Assad.

Los rebeldes habían decidido anteriormente retirarse del barrio "por motivos estratégicos", tras el asalto con artillería y tanques por parte de las fuerzas del régimen en el que, según la oposición, murieron 17 civiles. "La escasez de munición y armas obligó al comando a tomar esa decisión", informaron los activistas. Al parecer el avance de las tropas oficiales fue lento ante la fuerte resistencia ofrecida y debido a una tormenta de nieve.

Armas para los rebeldes

Por otra parte, algunos Estados árabes del Golfo anunciaron que suministrarían armas a los desertores del Ejército Libre de Siria. Aseguraron que a estas alturas no ven otra opción para poner fin a las matanzas por parte de las tropas del régimen. Se desconoce la cantidad de armas que los desertores introducen en Siria a través de las fronteras turca e iraquí.

El Consejo Nacional Sirio anunció la creación de un "consejo militar" para coordinar la entrega de armas por parte de Estados que simpatizan con la revolución siria. Con ello pretende evitar, además, que los combatientes que luchan contra el régimen sirio se conviertan algún día en milicias que no reconozcan ninguna autoridad política. El consejo no busca iniciar una guerra civil, sino evitar el caos, señaló su líder, Burhan Ghaliun, en París.

Sin embargo, el secretario general de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, afirmó que su organización no aprobó que se armara a la oposición siria, sino que trabaja en una solución política, al tiempo que intenta llegar a un alto el fuego que posibilite la entrega de ayuda humanitaria.

ONU condena a Siria por ataques a civiles

El presidente sirio está cada vez más solo en su lucha por aplastar una insurrección armada de casi un año contra su Gobierno. A pesar de esto, Rusia, China y Cuba votaron el jueves en contra de una resolución adoptada por el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, compuesto por 47 miembros, la cual condenó a Siria por violaciones que podrían considerarse crímenes contra la humanidad.

Por otra parte, Estados Unidos y sus aliados buscan una nueva resolución en el Consejo de Seguridad que, según diplomáticos occidentales, se enfocaría en los problemas humanitarios para intentar ganar el apoyo de Rusia y China, pero también sugeriría que Assad es el culpable de la crisis, postura a la que Moscú se opone.

Annan planea viajar a Siria

Mientras tanto, el enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, planea viajar a Damasco “muy pronto" para tratar de poner fin a la violencia en el país. "El mensaje es claro, que las matanzas y la violencia deben parar, las agencias humanitarias deben tener acceso para realizar su trabajo. Y es lamentable que eso no esté pasando", dijo el exsecretario general de la ONU que fue convocado para la tarea de mediar en el conflicto en Siria, tras una reunión con su sucesor, Ban Ki-moon, en Nueva York.

"Le rogaré (a Assad) que se involucre no solo conmigo, sino con el proceso que lanzamos hoy", añadió Annan. "Por el bien del pueblo sirio, que quedó atrapado en el medio, el camino es (la búsqueda de) una solución pacífica a través del diálogo". Antes de partir desde Nueva York hacia El Cairo, Annan advirtió que Assad podría no estar de acuerdo en encontrarse con él porque no se han reunido en los últimos años.

Tanto Ban Ki-moon como Kofi Annan instaron a la comunidad internacional a unirse para intentar alcanzar una solución al conflicto en Siria que, según la ONU, ha dejado ya "más de 7.500" muertos de ambos lados. El proceso diplomático de Annan está basado en el plan de acción de la Liga Árabe que insta a Assad a renunciar a su cargo, así como a la transición hacia un sistema político multipartidario. El plan exige también un cese de fuego, la liberación de todos los detenidos y acceso ilimitado de las organizaciones humanitarias a los sirios que han quedado atrapados en medio de la violencia.

Autor: Gabriel Domínguez (dpa, afp, rtr)

Editora: Emilia Rojas