Reelección de Cavaco en Portugal: una bofetada para los socialistas
24 de enero de 2011
Cavaco Silva festejó un contundente triunfo en la primera vuelta de las elecciones presidenciales, con un registro del 52,9 por ciento de todos los votos emitidos, y continuará habitando el Palacio de Belém en Lisboa por cinco años más.
Entretanto, Sócrates buscó quitar importancia a la derrota del candidato de su Partido Socialista (PS), el renombrado escritor Manuel Alegre, quien se tuvo que conformar con el segundo lugar y un magro 19,8 por ciento.
Sin embargo, el gobernante tuvo que admitir: "No podemos estar conformes".
La situación es "explosiva"
La elección estuvo centrada en la fuerte crisis financiera que atraviesa el país, de diez millones de habitantes y el más pobre de Europa occidental.
Cavaco, un economista y ex primer ministro de 71 años de edad, criticó durante la campaña electoral la política del gobierno minoritario de Sócrates con inusual dureza.
La situación es "explosiva", repitió el jefe de Estado en las últimas semanas. El gobierno demoró en reaccionar frente a la crisis, agregó.
Analistas predicen ahora una cohabitación más complicada entre el presidente y el gobierno.
Incluso no son pocos los que creen que Cavaco podría abandonar definitivamente su postura moderada y hacer uso del derecho constitucional de disolver el parlamento y convocar nuevas elecciones.
Un electorado profundamente decepcionado
Esto podría ocurrir si el gobierno decide pedir ayuda financiera a la Unión Europea o al Fondo Monetario Internacional, un paso controvertido rechazado actualmente tanto por el gobierno como por el PSD y demás partidos de la oposición.
Portugal es un país altamente endeudado. Debido a las medidas de saneamiento de la economía, con aumentos de impuestos y reducciones de los gastos públicos, la economía lusa sufrirá este año una contracción del 1,3 por ciento, según proyecciones del Banco Central.
Ya hace cinco años, Cavaco ganó las elecciones con una mayoría absoluta del 50,5 por ciento que hizo innecesaria una segunda vuelta.
En unos comicios con casi 9,7 millones de personas con derecho a voto se presentaron seis candidatos de estilos y perfiles diversos.
Sin embargo, las elecciones no consiguieron entusiasmar a un electorado profundamente decepcionado por la política y la situación económica.
Según los primeros resultados, este domingo un 53,5 por ciento de los habilitados no concurrió a los locales. Se trata de una cifra récord de abstención, señaló la Comisión Electoral.
dpa
Editor: Pablo Kummetz