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Reordenamiento cambiario en Venezuela: efecto nulo

Pablo Kummetz / ERS11 de marzo de 2016

En Venezuela rige un nuevo sistema cambiario, con dos tipos de cambio, uno “protegido” y uno “flotante”. DW habló al respecto con el economista Yesko Quiroga Stöllger, de la Fundación Friedrich Ebert, Alemania.

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"El consumidor no es más el beneficiario directo del tipo de cambio protegido, porque no consigue los productos subvencionados."Imagen: Getty Images/AFP/J. Barreto

¿Qué objetivos persigue el Gobierno con la creación de dos tipos de cambio, uno “protegido” y uno “flotante” y qué éxito pueden tener las medidas?

Las medidas cambiarias no son realmente sorprendentes y mucho menos representan un cambio de rumbo. Tiene sí el efecto de una devaluación, reduciendo el déficit del Estado en moneda nacional. Pero se mantiene un sistema múltiple de cambios en una situación de escasez creciente de divisas y de desabastecimiento de productos de primera necesidad. El consumidor no es más el beneficiario directo del tipo de cambio protegido, porque no consigue los productos subvencionados, si no, más bien, aquellos grupos que tienen acceso a la asignación de las divisas con tipo de cambio extremadamente barato, entre ellos, aunque ahora de forma más restringida, los turistas que viajan al exterior. Las medidas no van tener éxito en el sentido de resolver los problemas económicos actuales.

En Argentina, donde también había un sistema de tipos de cambios dirigido, el dólar fue liberado y no ha pasado mucho. ¿Por qué no sigue Venezuela el mismo camino?

El costo social de una reforma cambiaria, de liberación de precios y de reordenar el sistema de regulaciones, inclusive manteniendo el rol importante del Estado en cuanto a su papel de redistribución, va a ser muy alto. ¿Quién va a asumir el costo político?

¿Cuán realista es el dólar “flotante”, teniendo en cuenta que en el mercado negro se pagan a 1.200 bolívares por dólar, es decir seis veces más?

No es realista.

Para las importaciones de bienes “esenciales para la vida” (alimentos, medicinas y las materias primas para su producción) regirá el tipo de cambio “protegido”. Las exportaciones y la venta de petróleo se liquidarán al tipo de cambio “flotante”. ¿Qué supondrá el nuevo sistema para el comercio exterior de Venezuela?

Realmente no sé: no creo que con las medidas últimas se produzca un estímulo que lleve a un aumento sustancial de las exportaciones no petroleras o a la baja de la dependencia de importación de productos de consumo.

¿Qué efectos tendrá el nuevo sistema cambiario para la inversión extranjera?

No creo que las medidas tengan un efecto sobre el atractivo de Venezuela para la inversión extranjera. Tampoco creo que la inversión extranjera represente una solución para el dilema económico venezolano, ya que ésta se dirige preferencialmente a los sectores extractivos con sus reducidos impactos sobre producción y trabajo interno.