Stoltenberg en aniversario de masacre: Breivik fracasó

El primer ministro noruego, Jens Stoltenberg, depositó por la mañana, en presencia del rey Harald V, una corona de flores en el edificio del gobierno de la capital ante el que explotó la bomba que mató a ocho personas.

El primer ministro señaló que el 22 de julio de 2011, el autor del atentado, extremista de derecha Anders Behring Breivik, segó muchas vidas y provocó un dolor inconcebible, pero no logró su principal objetivo. "Su bomba y sus disparos pretendían cambiar Noruega. Pero el pueblo noruego ha respondido defendiendo sus propios valores. El atacante fracasó, el pueblo ganó", dijo ante el edificio en el que se encontraba su oficina.

Por primera vez desde los atentados, el barrio gubernamental en el centro de Oslo fue reabierto este domingo a los peatones, mientras se espera una decisión antes de que finalice el verano de si el edificio es demolido o refaccionado.

“Humanidad indestructible”

La población noruega defendió tras los atentados "una humanidad indestructible y la pluralidad de nuestra sociedad abierta y digna de confianza", señaló Stoltenberg en su discurso.

"Durante un año, muchos niños tuvieron que recorrer el difícil camino a la tumba de su padre o su madre. Padres y madres lloraron en las camas vacías de sus amados hijos e hijas. Y otros miles, hermanos, abuelos, amigos o colegas, sintieron nostalgia y desesperación". "No ha pasado un sólo día en que la tragedia no haya estado en el debate público. Entre otros aspectos, sobre lo que funcionó y lo que no. Y ése es un debate necesario e importante para aprender y evitar que algo así vuelva a ocurrir".

Stoltenberg pidió a los noruegos que sigan por el camino de la tolerancia mostrada tras los ataques, sin expresar odio. "Hoy debemos recordarnos los unos a los otros que el amor dura eternamente. El bien y la paz no se extinguen".

Mirando hacia delante

El 22 de julio pertenecerá para siempre a aquellos que perdieron la vida ese día (...) queremos recordar a los muertos con agradecimiento (...) pues el año pasado nos enseñó lo preciada y frágil que es la vida (...) Prometámonos unos a otros honrar a los muertos disfrutando de la vida".

Después del acto en Oslo, tuvo lugar una ceremonia religiosa en la que el presidente de las juventudes socialistas AUF, Eskil Pedersen llamó a mirar adelante. "Hoy queremos recordar y echar de menos. Mañana comienza un nuevo día, tenemos que seguir adelante, aunque no sin luto y dolor". Pedersen fue uno de los que logró huir de la masacre.

Fuente: dpa

Editora: Emilia Rojas