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Trump no podrá encarcelar a niños junto a sus padres

10 de julio de 2018

Donald Trump sufrió un golpe en su restrictiva política migratoria tras rechazo de una jueza federal al encarcelamiento de niños indocumentados juntos a sus padres, como pretendía hacer la administración republicana.

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Manifestación contra política migratoria de Trump en Washington
Manifestación contra política migratoria de Trump en WashingtonImagen: AFP/Getty Images/N. Kamm

Se trata de un "intento cínico" de sortear la ley, consideró la jueza Dolly Gee, de la Corte Federal de Distrito en Los Angeles, en su decisión. El envío de los menores a la cárcel con sus padres fue la medida con la que Trump decidió poner fin a la separación de familias en la frontera que él mismo inició y que ha llevado a que unos 3.000 menores de edad hayan sido arrebatados de sus padres desde el 19 de abril.

La administración Trump ha bautizado esta política como "tolerancia cero". Lo que hay detrás de todo ello es una política que pretende desincentivar la llegada de inmigración ilegal. "Tengo una solución (para la separación de familias)", dijo este 10 de julio Trump a los periodistas antes de emprender viaje rumbo a Europa.

Trump: "Tengo la solución: no vengan ilegalmente”

"Decir a la gente que no venga a nuestro país ilegalmente. Esa es la solución. No vengan a nuestro país ilegalmente. Vengan como lo hacen otras personas. Vengan legalmente". La mayoría de las familias separadas procede de Honduras, El Salvador y Guatemala y llegaron a Estados Unidos huyendo de la violencia en el llamado Triángulo Norte centroamericano. La ola de indignación dentro y fuera de Estados Unidos que generaron las separaciones llevó a Trump a firmar el 20 de junio una orden ejecutiva para ponerles fin.

Pero esta no terminó con la persecución penal de los indocumentados, que es la que generaba las separaciones porque los padres son enviados a la cárcel y la ley prohíbe que los niños estén encarcelados más de 20 días.

Lo que Trump pretendía era mantener juntas a las familias obteniendo el permiso de los tribunales para que los niños puedan estar en la prisión junto a sus progenitores. Esa autorización es la que la jueza Gee se ha negado a dar. Para poder reunir a las familias, los padres son puestos en libertad mientras se tramitan sus casos en las cortes migratorias y deben llevar tobilleras electrónicas que permiten conocer su paradero.

La organización no gubernamental RAICES ofreció al Gobierno estadounidense 20 millones de dólares para pagar las fianzas de todos los indocumentados que están en prisión y han sido separados de sus hijos.

JOV (dpa, cbs)