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Un brasileño experimentado

24 de julio de 2002

Sergio Vieira de Mello será el sucesor de la Irlandesa Mary Robinson al frente del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU. El diplomático brasileño asumirá el cargo a mediados de septiembre.

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Administrador de la ONU en Timor Oriental.Imagen: AP

El funcionario de 54 años es considerado un hombre experimentado en la Organización mundial. Por ello no sorprende que su nombramiento, hecho por el Secretario General Kofi Annan, haya sido aprobado por la unanimidad de la Asamblea General de 189 miembros, y haya recibido el beneplácito inmediato de los gobiernos de Gran Bretaña y Estados Unidos.

Vieira de Mello tiene detrás de si una larga carrera en la institución a la que pertenece desde 1969. Ganó prestigio como subsecretario general para asuntos humanitarios, Casi toda su carrera la hizo en la Oficina del Alto Comisariado para los Refugiados UNHCR, con sede en Ginebra. Lo que lo llevó a los destinos y problemáticas más diversas, desde Bangladesh, Chipre, Sudán por mencionar algunas. Desde Perú fue jefe regional de la UNHCR para la región norte de América Latina.

Futuro multiétnico

Entre 1998 y 1999 dirigió la misión de la ONU en Kosovo de manera interina y defendió la intervención militar en la antigua Yugoslavia como una "guerra necesaria y justa, a la que –según él- no le sucedería precisamente una paz justa". Vieira de Mello abogaba por un futuro multiétnico en la provincia al sur de Serbia. Pero la misión donde cocechó un prestigio indiscutible, fue en la Misión de la ONU en el Timor Oriental, que logró coronar con la realización de elecciones libres que condujeron a la independencia de manera pacífica. Ésta misión fue lo que le dió el reconocimiento como experto en asuntos de refugiados.

La misión más difícil

Vieira de Mello es un hombre que habla con fluidez el inglés, el francés, el español y el portugués, su lengua natal. Se educó en Río de Janeiro y realizó doctorados de filosofía y ciencias sociales en la Sorbona en París. El cargo que ocupará ha sido controvertido desde su creación, ya que sus predecesores han sido criticados en el pasado por denunciar abusos a los derechos humanos o por guardar silencio ante grandes atrocidades.

Robinson, su antecesora, quien fue presidenta de Irlanda, dejará su cargo en septiembre después de una gestión de cinco años, durante los cuales aumentó el personal, creó más oficinas y dejó un legado que es evaluado de manera diferenciada. Recibió el reconocimiento de activistas, pero la crítica y la irritación de potencias como China, Rusia y Estados Unidos, por hacer su trabajo, es decir, criticar las acciones cometidas en detrimento de los derechos humanos. Uno de los puntos más candentes donde Robinson fracasó, fue en el manejo de Estados Unidos de los prisioneros afganos que tiene retenidos en Guantánamo, Cuba. Mary Robinson denunció el boicot de la conferencia sobre el racismo de la ONU, por parte de Estados Unidos.

La Organización pro-derechos humanos "Human Rights Watch", afirma que el nuevo hombre de Kofi Annan no se comprometerá tanto como su predecesora. Afirma también que Vieira de Mello no tiene mucha experiencia en la materia. La Oficina del Alto Comisariado tiene un presupuesto de casi 50 millones de dólares y cuenta con unos 200 empleados en la sede en Ginebra.