Una semana de comercio justo ¿y después?
20 de septiembre de 2004
En Berlín y en otras ciudades alemanas se efectúa de este 20 de septiembre hasta el próximo 26 de septiembre un esfuerzo para concienciar a los consumidores.
En la campaña participan grandes cadenas comerciales, pero también pequeñas tiendas ecologistas y naturistas. Se trata de animar al consumidor alemán a comprar aquellos productos, principalmente agrícolas, que se han elaborado de forma ecológica y cuyas ganancias benefician directamente a los agricultores.
El beneficio es mutuo, por un lado las ganancias permiten a los agricultores de países en vías de desarrollo mejorar su calidad de vida, por el otro, los consumidores obtienen un producto de alta calidad.
Esperanza y vida bajo la Puerta de Brandenburgo
El Gobierno alemán apoya la venta de esta mercancía y en general lucha por condiciones comerciales más justas para los países en vías de desarrollo.
La ministra alemana de Cooperación y Desarrollo, Heidimarie Wieczorek-Zeul inauguró conjuntamente con Fátima Ismael, gerente de la cooperativa nicaragüense Soppexcca, la “Semana de Comercio Justo 2004” con un “desayuno justo” bajo la Puerta de Brandenburgo.
A la luz de la mala situación en el mercado del café y la creciente pobreza de los cosechadores de café en los países en vías de desarrollo, Fátima Ismael, gerente de Soppexcca, explicó que gracias a esfuerzos como el del comercio justo, ninguno de los agricultores nicaragüenses que pertenece a su grupo ha tenido que abandonar sus parcelas y pueden brindar educación a sus hijos.
El comercio justo representa para los miembros de la cooperativa, en palabras de Ismael, “esperanza y vida”.
Esfuerzo con 51 millones de resultados
Del 20 al 26 de septiembre se llevarán a cabo diversas acciones en las que participan no sólo representantes políticos sino también actores de renombre en Alemania con el fin de atraer la atención del gran público.
El esfuerzo va acompañado de una serie de concursos y de ideas creativas. Por ejemplo la cadena comercial EDEKA, con cobertura a nivel nacional, venderá durante esta semana sólo plátanos o bananas ecológicas con el sello de TransFair.
A pesar de la mala situación coyuntural en Alemania son muchos los ciudadanos que apoyan el comercio justo. Según datos aportados por la iniciativa TransFair, a pesar de la guerra de precios en el sector comercial, las ganancias logradas con los productos que llevan el sello del comercio justo ascendieron en 2003 a 51 millones de euros, con lo que lograron mantenerse estables frente al año previo.
La Organización TransFair, creada por 38 entidades de ayuda al desarrollo y organizaciones de protección al consumidor, otorga el sello a aquellos productos que provienen de países en vías de desarrollo, se han elaborado contemplando criterios ecológicos específicos, y cuyas ganancias son entregadas a los productores, por lo general el precio de venta imperante en el mercado internacionales.