Venezuela: tendencia autoritaria
10 de enero de 2007
Hugo Chávez comenzó su tercer mandato anunciando el futuro traspaso al Estado de la empresa de telecomunicaciones CANTV, y de la empresa Electricidad de Caracas. También el Banco Central perderá su independencia, según anunció el presidente venezolano. Chávez dijo que todo lo que fue privatizado debe volver a las manos del Estado y pidió a los diputados de la Asamblea Nacional que le den los poderes especiales para realizar esta recuperación. "Vamos rumbo a la república socialista de Venezuela", destacó el gobernante reelegido el pasado 3 de diciembre con casi dos tercios de los votos de los electores. La noticia provocó un desplome de la Bolsa de Valores de Caracas del 18,66 por ciento.
Agudización de conflictos
"La serie de medidas anunciadas es una profundización de la transformación radical del proyecto chavista y eso implica una polarización tanto interna como una agudización de los conflictos externos tanto con Estados Unidos como con otros países latinoamericanos. Los insultos al presidente de la OEA, José Miguel Insulza, son un signo de estos conflictos al interior de América Latina", afirmó.
El experto recuerda que Insulza hizo una advertencia sobre la no prolongación de la licencia de la emisora Radio Caracas Televisión (RCTV), pero en este sentido es importante distinguir entre las nacionalizaciones económicas, y la tendencia a una centralización más bien autoritaria en términos políticos. "Es en éste terreno donde quizás se perfilan las tendencias más preocupantes", señala.
Rasgos dictatoriales
Muchos observan en Hugo Chávez rasgos dictatoriales cada vez más claros entre más tiempo se prolonga en el poder. ¿Comparte usted esta opinión?
Hay una radicalización de las transformaciones socioeconómicas que van de la mano con una creciente centralización del poder político. Dictatorial no lo es todavía porque ha sido confirmado por elecciones democráticas pero todo el juego de balance de poderes, el respeto por la oposición, ahí hay una actitud preocupante que ha ido creciendo, que también afecta su apoyo directo. Los recientes cambios en el gabinete todos apuntan a una mayor centralización y un estilo más autoritario. Todavía no se puede hablar de una dictadura, hay partidos opositores que actúan, pero la tendencia es autoritaria.
Venezuela no busca ser una copia de Cuba, pero Chávez se orienta en el modelo impuesto por Fidel Castro.
Explícitamente, Chávez toma el ejemplo de Cuba como modelo, va en esa dirección pero no está ahí, en Cuba hace más de cuatro décadas que no ha habido elecciones pluralistas y Venezuela acaba de celebrar elecciones con la competencia de la oposición hace un par de semanas, entonces hay que distinguir muy bien entre dirección y realidad.
Elites políticas desprestigiadas
Por último ¿a qué atribuiría usted el éxito electoral que ha tenido Hugo Chávez?
No es tan difícil explicarlo, de alguna forma porque el sistema anterior, liberal, se ha deslegitimizado fuertemente en Venezuela por la corrupción de las élites políticas como por la incapacidad de actuar contra las tremendas desigualdades sociales que más bien fueron acentuadas. Entonces, una agenda de reforma y bienestar social para las mayorías tiene muchas posibilidades de tener un apoyo social muy fuerte y Hugo Chávez ha sido un líder extraordinario en este sentido. En segundo lugar, los altísimos precios del petróleo le dan un margen de maniobra muy impresionante para distribuir beneficios sociales ampliamente y eso explica su éxito político.
El tercer elemento es la polarización política provoca que o se esté con o en contra de Hugo Chávez, eso le ha dado mucho poder a nivel doméstico, pero el precio es que la polarización es políticamente muy complicada para el país.
Bert Hoffmann es investigador en el Instituto Alemán de Estudios Globales y Regionales (GIGA), con sede en Hamburgo.