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Votar en Alemania: control y transparencia

Anna Peters/ CP20 de septiembre de 2013

El proceso electoral alemán está sometido a controles estrictos para evitar la manipulación de las boletas, y no existe el voto electrónico. ¿Se puede garantizar la transparencia al cien por ciento?

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Imagen: picture-alliance/dpa

“El proceso electoral en Alemania es transparente en cada una de sus etapas”, explica Klaus Pötzsch, portavoz de la Oficina Electoral y responsable de la organización y desarrollo de todos los comicios alemanes a nivel nacional y europeo. Para que todo salga bien, “en cada local electoral hay de ocho a nueve ayudantes”, dice. Cerca de 630.000 de ellos trabajarán ad honorem el domingo 22 de septiembre de 2013. En Alemania, todo ciudadano que haya cumplido los 18 años puede inscribirse en su distrito para colaborar como ayudante, pero también se les puede solicitar que cumplan con dicha tarea, algo que solo pueden rechazar por razones comprobables. El trabajo de los ayudantes es verificar que las urnas estén realmente vacías al comienzo de los comicios y comprueban el permiso de sufragio que cada elector recibe antes por correo.

Transparencia en las urnas

Los ayudantes electorales también se ocupan de que los votantes no estén sometidos a ningún tipo de influencia en el lugar en donde depositarán su papeleta. Si los miembros de un determinado partido intentaran, por ejemplo, ganar un par de votos más en el local, ellos deberían impedirlo. Además, se comprometen a ser neutrales. Eso no quiere decir que no se les permita ser miembros de un partido, por el contrario: se debe tratar de que en ellos se refleje la pertenencia a los diferentes partidos representados en su distrito. A través de esa diversidad política se intenta garantizar un desarrollo neutral de las elecciones.

Klaus Pötzsch, portavoz del director electoral federal.
Klaus Pötzsch, portavoz del director electoral federal.Imagen: Destatis

Exactamente a las 18:00 hs, los ayudantes electorales cierran los locales y cuentan los votos registrándolos en un protocolo. “El resultado se comunica a las oficinas municipales, y éstas informan a los directores electorales del distrito, describe Pötzsch el procedimiento. El director electoral del distrito transmite los resultados al director electoral del Estado o Land correspondiente, y éste al director electoral federal.

Voto por carta: ¿el talón de Aquiles?

La transparencia y los mecanismos de control están concebidos para evitar la manipulación de votos. En general, eso funciona, pero no se puede garantizar en un 100 por ciento que siempre sea así, aclara Pötzsch.

En Alemania, el voto postal, cada vez más popular, es un punto débil en cuanto una posible manipulación. Cerca de un 30 por ciento de las personas con derecho a voto utilizan este medio para emitir su sufragio. Las papeletas postales tienen la desventaja de que pueden ser falsificadas. Puede suceder que una persona que está a cargo de un anciano rellene la boleta, por ejemplo. En 2002 se manipularon las elecciones municipales en Dachau debido a que se falsificaron 400 votos postales. El fraude se descubrió porque el falsificador había rellenado las papeletas con el mismo bolígrafo.

Voto electrónico, anticonstitucional en Alemania

También en Alemania se introdujo en 2005 el voto por computadora, tal como existe en Brasil y EE. UU. Sin embargo, el Tribunal Constitucional alemán lo declaró anticonstitucional en 2009. El motivo: el proceso electoral debe ser público, y lo mismo vale para el recuento de votos. “Está prescrito que cada sufragio sea leído en voz alta y protocolado en público. La palabra mágica es transparencia”, dice Pötzsch.

Cabinas para depositar los votos en el local electoral.
Cabinas para depositar los votos en el local electoral.Imagen: picture-alliance/dpa

En público significa que todos los ayudantes electorales deben estar presentes en el local durante el recuento. Y si luego de las elecciones quedan dudas en cuanto a la legalidad del procedimiento, debe ser posible volver a contar los votos. Eso, según el veredicto del Tribunal Constitucional, no era posible con el voto electrónico.